Enterarte de que tu hijo o hija ha buscado pornografía en internet, puede generar angustia y preocupación; sin embargo, es importante que manejes esta situación con calma y comprensión. 

Como padre o madre, tu papel es guiarlos y proporcionarles orientación sobre cómo abordar esta curiosidad de manera saludable y responsable.

Así que te dejamos algunos consejos de cómo hacerlo de la mejor manera:

1. Respira: Enterarte de esto puede generarte preocupación; tómate un rato para calmarte y evaluar la situación.
    
2. Válida su curiosidad: Reconoce que la curiosidad sobre la sexualidad es una parte natural del desarrollo de un adolescente. Haz que se sientan comprendidos y que no están haciendo algo malo por querer aprender sobre su cuerpo y las relaciones sexuales.
    
3. Proporciona otros medios de aprendizaje: Los adolescentes utilizan la pornografía como fuente de información. Prepara una pequeña lista de series, libros, artículos o vídeos que podrías compartirle a tu hija o hijo para que tenga otras fuentes de información que aborden los temas de sexualidad de forma apropiada. Asegúrate que les des información que refleje los valores que quisieras que ellos adopten en sus relaciones interpersonales.  
    
4. Explora con tus hijos: Puedes utilizar alguno de los medios mencionados en el punto anterior para crear un espacio de conversación, donde puedas resolver sus dudas y entender sus preocupaciones alrededor del tema. Además, no subestimes la importancia de hablar sobre la sexualidad en la vida cotidiana. Por ejemplo, cuando veas una serie en la que los personajes se enamoran, destaca las características de la relación que llaman tu atención; si notas que uno de los personajes muestra falta de respeto hacia el otro, aprovecha la oportunidad para enfatizar la importancia del respeto en las relaciones personales.
    
5. Establece límites: Es importante proteger la integridad de tu hija o hijo. Considera la posibilidad de implementar controles parentales y bloquear el acceso a sitios web que tengan contenido pornográfico. Es relevante comunicarle que es por su seguridad, más no porque la curiosidad que siente sobre la sexualidad sea algo malo. 
    
6. Presta atención a cambios en su comportamiento: Aunque la curiosidad por la sexualidad es una parte normal del desarrollo de un adolescente, es esencial que observes si este comportamiento se está manifestando de manera saludable y adecuada. Los cambios en su comportamiento pueden ser indicadores sobre cómo están manejando esta curiosidad y si están enfrentando desafíos en este proceso de exploración. Por ejemplo, algunos comportamientos que no están bien son: el aislamiento social, la disminución del rendimiento académico o el aumento en el uso de dispositivos electrónicos para acceder a contenido inapropiado. En ese caso, lo recomendable es consultar con un especialista como un psicólogo.

Adicionalmente, es importante generar un espacio de confianza donde tu hija o hijo sepa que puede acudir a ti para resolver sus dudas y buscar ayuda. Recuerda que la curiosidad no espera. Como padre o madre, tu orientación y pautas son fundamentales para su desarrollo

Fuente consultada:
Sex Positive Families