Todos queremos gozar de una buena salud mental, pero ¿sabemos qué significa eso? 

La salud mental no es simplemente ausencia de enfermedad, sino que tiene que ver con un estado de bienestar para la persona en todo sentido. Es un proceso dinámico que depende fundamentalmente del contexto social, cultural, histórico, etc. Un adecuado estado de salud mental permitirá, entre otras cosas, afrontar diversas situaciones de conflicto en la vida de la persona para desarrollar una vida social adecuada. 

Cuando se oye hablar de salud, generalmente se suele brindar principal atención a la salud física. En muchas ocasiones la Salud Mental queda en un segundo plano cuando debería ser todo lo contrario, ya que es de gran importancia para un adecuado desarrollo del ser humano, para estar en armonía con uno mismo y con el entorno que lo rodea.

Para fomentar tu propia salud mental y la de tus hijas e hijos podemos:

• Expresar y reconocer las emociones libremente: Cuando sentimos emociones placenteras y no placenteras, siempre de forma asertiva.
• Hablar y poner en palabras nuestras emociones y pensamientos.
• Reconocer cuando cometemos errores hacia nosotros mismos y los demás.
• No autoexigirse y tratar de encajar en el molde de “madre/padre perfecto” o exigir un “hijo o hija perfecta”.
• Entender que no siempre tenemos por qué estar bien y que no podemos con todo.  
• Generar vínculos saludables: familiares, de amistad, de pareja, donde prime la empatía y la escucha.
• Generar espacios de tiempo para nosotras y nosotros. Puede ser desarrollando alguna actividad que te guste y también, fomentar que tus hijas e hijos tengan estos espacios.
• Reconocer qué cosas no nos hacen bien y poner límites cuando creemos necesario.

Todas las personas experimentamos o experimentaremos algún tipo de sufrimiento psicológico en algún momento de nuestra vida. Por ello, es importante reconocer nuestros malestares y contar con herramientas para poder sobrellevar estos momentos sin vergüenzas ni estigmas, así como poder pedir ayuda cuando sea necesario, sin que sea un tabú.

Si consideras que estás teniendo muchas dificultades para mantener una buena salud mental, o si crees que tu hija o hijo pueda estar teniendo dificultades, no dudes en buscar ayuda psicológica o de algún especialista. 

La salud mental debe ser nuestra prioridad. Cuidar tu propia salud mental es cuidarte y cuidar a tus hijos e hijas.